Universo Azud. IES Azud de Alfeitamí, Almoradí
Como si del mismísimo Big Bang se
tratase, nació un nuevo universo, el Azud, que se iría consolidando
gracias a las numerosas partículas que lo formaban. Es difícil
creer, o conseguir entender, cómo de algo tan pequeño se pueden
llegar a obtener algo tan grande. Pero así es, la unión de
protones, electrones, quarzs, neutrinos y mil partículas más,
diferentes entre sí – cabe decir – consiguen que se formen las
estrellas más grandes y brillantes jamás vistas.
Cuerpos con luz propia, que interactúan
entre sí, consiguiendo formar grandes constelaciones en las que las
relaciones son de lo más amplias y enriquecedoras. Es cierto que
también se crean agujeros negros que intentan atraparte con su
gravedad, pero es en ese momento cuando la constelación consigue
verse apoyada por asteroides sin dirección fija. ¡Benditos vectores
libres! Y es que gracias a la rapidez con la que llegan estas rocas
conseguimos retomar el camino siguiendo la órbita más cercana.
Existe la posibilidad de que nos perdamos y acabemos en otras
galaxias pero, ¿acaso no es magnífico descubrir nuevos mundos,
entrelazar nuevas conexiones, sentirse vivo con cada nuevo rayo de
luz que nos transmiten esos seres, hasta entonces, desconocidos?
Y es que así es nuestro universo,
libre, creativo e inconformista. No nos basta con haber seguido la
línea evolutiva que nos ha llevado hasta el Homo Sapiens Sapiens, ni
haber desnombrado al señor Plutón de su título planetario,
¡queremos conseguir mucho más! Nos expandimos hacia el infinito,
cosa imposible – diréis algunos – pero lo cierto es que ya lo
estamos consiguiendo... Con cada línea, con cada imagen, con cada
recuerdo, hacemos que lo que parecía un sueño, un imposible, se
haga realidad. Las relaciones interpersonales ya no son lo que eran
para estos seres de 23 parejas de cromosomas en cada célula
diploide. Hacemos que la mente se despierte, se inquiete y quiera
descubrir nuevos horizontes. No obstante, para explorar el resto de
galaxias, primero tenemos que conocer nuestro propio universo... Ese
lleno de incertidumbres y miedos, en los que algún que otro cometa
despistado se acaba estampando de vez en cuando.
En estos casos, rara es la vez en la
que aparecen asteroides libres y te sacan de esa oscuridad, pero
entendemos que no es un “él”
sino un “nosotros”
y conseguimos encontrar un punto de equilibrio favorable entre el
miedo y la valentía, incertidumbre y superación, haciendo que nadie
vuelque y en ese caso se levante con más fuerza.
Cuesta
entender lo que se siente una vez sabes que eres libre, cuando todas
esas armaduras y barreras que habías colocado con tanto cuidado y
precisión ya no te hacen falta, cuando empiezas a comprender que la
mejor imagen que puedes mostrarle al mundo es la de ti mismo, sin
maquillaje ni complementos... pero, ¿sabéis que es lo mejor? Que
tienes a tu lado a otras mil estrellas vibrando al mismo son que tú,
que la frase de “La unión hace la fuerza”
nunca antes había cobrado tanto sentido y que si realmente quieres,
puedes.
Cristina Villa
La verdad Jose es que se nota que te has currao mucho este video, aunque en mi opinion es un poco pesado pero esta muy pero que muy bien.
ResponEliminaAunque este año no vamos a volver a estar todos juntos de nuevo, espero que esta pequeña experiencia que hemos tenido nos sirva de algo y no se nos olvide asi como asi. Yo en especial le quería dar las gracias a Jose que es que se a encargado desde el primer dia que piso el IES Azud de Alfeitami en que disfrutemos aprendiendo y es de las pocas profesoras que te hacen mirar hasta en el ultimo rincon si hace falta para que te des cuenta de lo afortunado que eres.
Jose, muchas personas te lo habran dicho ya pero, gracias de todo corazon.
PD:Siempre nos quedaran las excursiones a la montaña.
Mil besos, Laura.